-hubiese querido un libro.
- y yo – dice ella- quise una lámpara art decó.
Ahora tienes una lámpara y la alimentas con las luces tenues y melancólicas de los desvelos; imaginarte ajustar el bombillo en las madrugadas me agobia con una ternura imposible de expresar,
-hubiese querido que fuese mía,
-Piel de uso
La tibieza y esas cosas, las sábanas tan limpias, el color salmón y los dibujos kitch de parejas amándose, enmarcados por listones baratos - los espejos, tu boca laboriosa y los espejos -, un recuerdo de niñez y a cada instante el cucú suena en la biblioteca o vuela un ave entre las ramas del álamo.
De nuevo bailarás por las cornisas trastornada por el folk y te expondrás al disparo de los aficionados.
Espero el retorno de las yeguas, queriéndote tanto.